lunes, 25 de marzo de 2013

EXPEDIENTE DURRUTI: CIRCUNSTANCIAS

Durruti tumbado en una de las
 camas del Hotel Ritz, donde fue atendido
al haber sufrido un disparo en el tórax.
Fuente: Pedro de Paz 



   El diagnóstico de los cuatro doctores que le vieron en la madrugada fue una hemorragia pleural.

   La autopsia reveló que el deceso se debió a los destrozos causados por una bala calibre nueve largo, la cual penetró el tórax y lesionó importantes vísceras.







SU MUERTE

   El 19 de noviembre de 1936, los milicianos se colocan en la línea del frente de la Ciudad Universitaria y se preparan para asaltar el Hospital Clínico, que estaba bajo las tropas moras.

En la tarde del domingo 22, una gran masa de trabajadores daba
su último adiós a Durruti en Barcelona.
  Tras varios enfrentamientos consiguen acceder al inmueble pero durante su acción son rechazados por los destacamentos allí refugiados y se inicia un brutal combate en el interior del recinto. La lucha se lleva a cabo planta por planta, habitación por habitación, prácticamente cuerpo a cuerpo.
   Tras varias horas, los milicianos deciden replegarse y volver a sus posiciones. La moral de los libertarios es muy mala y muchos se plantean la posibilidad de abandonar su posición, ya que habían estado cuatro días combatiendo sin descanso, sin dormir, ateridos por el frío y prácticamente sin comer.


   Los mandos de la columna informan a Durruti de la difícil situación y éste decide ir personalmente al frente para averiguar lo que sucede acompañado de Julio Graves, su chofer habitual, y del sargento Manzana, seguidos en su recorrido por un segundo vehículo, en el que viajan Antonio Bonilla, Lorente y Miguel Doga.

   Cuando se encuentra a pocas manzanas del Hospital Clínico, Durruti se visualiza un grupo de milicianos que parece retirarse y abandonar sus posiciones e inmediatamente le ordena a Graves que detenga el vehículo para amonestarlos, y decide bajar el mismo. Tras una breve conversación con ellos, se dirige de nuevo al coche y en ese momento se escucha un disparo, y el anarquista leonés se desplomó al suelo con una bala incrustada en su pecho. Sus acompañantes, en estado de sock, lo suben al coche e inmediatamente se dirigen a gran velocidad hacia el Hotel Ritz.

Tumba de Durruti
en el cementerio de Montjuïc (Barcelona)
  Tras ser atendido por un equipo médico capitaneado por los doctores Bastos Ansart y Santamaría durante doce horas en las que el herido se debatiría continuamente entre estados de semiinconsciencia, Durruti fallece en la madrugada del 20 de noviembre de 1936.

   Su cuerpo fue entregado a los servicios especializados del Municipio de Madrid para ser sometido a un proceso de embalsamamiento, ya que sería trasladado y enterrado en Barcelona. Su deceso es ocultado a la población con el fin de evitar desánimos entre los milicianos.

A continuación, se adjunta un video sobre el entierro de Durruti:




No hay comentarios:

Publicar un comentario